Tomar el sol con las medidas de prevención necesarias aporta muchos beneficios para nuestra piel. Nos carga de vitamina D, mejora nuestro estado de ánimo, el aspecto de la dermis y nuestro sistema inmunológico.

Después de pasarnos horas boca arriba-boca abajo, siempre con crema solar, ya podemos decir que nuestra piel está bronceada. Ahora bien, ¿cómo puedo prolongar mi bronceado de manera saludable?

¡Presta atención a los siguientes consejos para lucir una piel bronceada, hidratada y radiante durante más tiempo!

1.Plus de hidratación: En los meses de verano, la piel del rostro puede presentar diferentes tonalidades y podemos sufrir degradación en nuestros tejidos. Es por esto que una piel hidratada y nutrida, mantendrá el bronceado más tiempo. Para seguir una rutina basada en la hidratación, nos ayudará cada mañana y cada noche aplicar una crema hidratante.

También es muy importante que nos mantengamos hidratados por dentro, por lo que no debes olvidar beber mucha agua durante esta época tan calurosa.

2.Exfoliación: En verano apostaremos por una exfoliación más suave pero más frecuente. ¿Sabes por qué? En estos meses, el uso de protectores solares, aceites y cremas corporales se incrementa. Es por esto que necesitamos oxigenar los poros tras un uso prolongado de productos cosméticos.

Otro motivo para incorporar más veces la exfoliación, tanto corporal como de rostro, en nuestra rutina de belleza es el de eliminar las impurezas y células muertas de manera que la piel pueda absorber mejor los productos que te apliques en ella o los rayos del sol.

3.- Alimentación:No podemos olvidar el papel tan importante que juega la alimentación en todo esto. Y es que, ingerir los alimentos correctos, aparte de mejorar nuestra salud, hará que nuestro bronceado luzca bonito y saludable ¡por más tiempo!¿De qué alimentos estamos hablando? Nos centraremos, concretamente en los denominados betacarotenos, que pertenecen al grupo de los carotenoides. Son una gran fuente de vitamina A y muy antioxidantes.

Incorporar estos alimentos en tu dieta diaria ayudará a proteger la piel de los radicales libres y reducirán el riesgo de sufrir quemaduras solares. Son unos alimentos imprescindibles si queremos mantener una piel sana y bronceada. Podemos incorporar en nuestra dieta zanahorias, tomates, melón, calabaza, nísperos o mango. En general lo encontramos en verduras y frutas de color amarillo y naranja y en las verduras de hoja verde como el brócoli. ¡Alimentos muy sabrosos!

4.- También influye la manera en la que estamos expuestos al sol, por lo que hazte con un buen protector solar antes de comenzar todos estos consejos. Así conseguirás que el bronceado sea progresivo y no acabarás mudando la piel a los pocos días.

¿Te han servido nuestros consejos sobre cómo puedo prolongar mi bronceado? ¡Comparte tus trucos con nosotr@s!